La exposición, que celebra los primeros 50 años del Museo Textil, permite admirar la generosa donación de la colección por parte del médico florentino Giovanni Falletti, un coleccionista ecléctico, que conservó y coleccionó artefactos textiles, bordados, libros, grabados, joyas, armas históricas y máscaras rituales de Europa y muchos países asiáticos y africanos.
Se exponen alrededor de 2.000 objetos muy heterogéneos, entre ellos artefactos de increíble valor histórico, artístico y antropológico como: 250 grabados japoneses de la segunda mitad del siglo XVIII y XIX de artistas como Hokusai, Hiroshige, Kuniyoshi, Utamaro;  tejidos de manufacturas europeas del siglo XV al XVIII; más de 450 litografías, aguafuertes, xilografías y grabados de los siglos XVI al XIX, incluidos Dürer, Van Leyden, Salvator Rosa, Piranesi, Max Klinger, Lorenzo Viani; más de 1.000 objetos entre bordados, bandas ornamentales, paneles, máscaras, joyas, armas rituales de África, Asia Central, Asia Oriental y América del Sur.
Instalada en la sala dedicada a los tejidos históricos, la exposición se desarrolla en un itinerario cronológico que cruza cuatro siglos de gran manufactura textil y que atraviesa estilos, producciones, materiales y temáticas, desde el siglo XV hasta finales del siglo XVIII.
Utilizados para la confección de prendas muy suntuosas destinadas a las aristocracias de la época, estos tejidos, debido a su enorme valor, posteriormente fueron donadas a instituciones religiosas que las reutilizaron para crear vestimentas sagradas como casullas, dalmáticas y capas.
La experiencia de la visita se enriquece con la presencia de dos dispositivos multimedia que cuentan la historia del proceso de fabricación de los tejidos y el desarrollo del arte de la seda hasta el período preindustrial. Los microscopios digitales permiten observar de cerca la estructura interna y la complejidad de los tejidos de terciopelo, damasco, brocado y lampas (tejido de seda). Finalmente, las reproducciones gráficas colocadas junto a los tejidos ilustran la evolución de los principales motivos decorativos adoptados por los talleres entre los siglos XV y XVIII.