LOUISE BOURGEOIS – Do Not Abandon Me
Coincidiendo con el décimo aniversario de su inauguración, el Museo Novecento celebra así a Louise Bourgeois, una de las protagonistas absolutas del arte de los siglos XX y XXI con la exposición No me abandones. El proyecto trae por primera vez obras a Florencia.
Se exponen casi un centenar de obras, entre ellas numerosas obras sobre papel creadas en los años 2000 y esculturas de diversos tamaños, en tela, bronce, mármol y otros materiales, así como la Pareja de arañas.
La exposición se divide entre las salas de la planta baja y la primera planta, ocupando casi todo el edificio, y presenta al público numerosos gouaches realizados durante los últimos cinco años de la vida de Bourgeois, que exploran los ciclos de la vida a través de una iconografía de la sexualidad, procreación, nacimiento, maternidad, alimentación, dependencia, pareja, unidad familiar y flores, con especial atención a la díada madre-hijo.
Bourgeois experimentò sentimientos de aislamiento y soledad incluso en medio de la vida familiar. Ella atribuyó esas emociones al "trauma de abandono" que experimentó cuando su padre partió a la Primera Guerra Mundial y ella aún no tenía tres años. En No me abandones, los lazos que unen a padre e hija se transfieren a madre e hijo, conectados por el cordón umbilical.
Se exponen casi un centenar de obras, entre ellas numerosas obras sobre papel creadas en los años 2000 y esculturas de diversos tamaños, en tela, bronce, mármol y otros materiales, así como la Pareja de arañas.
La exposición se divide entre las salas de la planta baja y la primera planta, ocupando casi todo el edificio, y presenta al público numerosos gouaches realizados durante los últimos cinco años de la vida de Bourgeois, que exploran los ciclos de la vida a través de una iconografía de la sexualidad, procreación, nacimiento, maternidad, alimentación, dependencia, pareja, unidad familiar y flores, con especial atención a la díada madre-hijo.
Bourgeois experimentò sentimientos de aislamiento y soledad incluso en medio de la vida familiar. Ella atribuyó esas emociones al "trauma de abandono" que experimentó cuando su padre partió a la Primera Guerra Mundial y ella aún no tenía tres años. En No me abandones, los lazos que unen a padre e hija se transfieren a madre e hijo, conectados por el cordón umbilical.
Notas de acceso:
Acceso directo desde taquilla y entrada en la primera franja de visita disponible.
Última entrada una hora antes del cierre.
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